Audi Driving Experience en el Jarama

Javi Vicente    @javivicente    19 noviembre 2009     6 min.
Audi Driving Experience en el Jarama

Hace unos días asistimos al mítico circuito del Jarama para ponernos a los mandos de dos modelos de la marca alemana de los cuatro aros. La jornada prometía interesante, y vaya si lo fue. Nunca había dado tantas vueltas al circuito madrileño de forma tan seguida y lo peor de todo es que me quedé […]

Hace unos días asistimos al mítico circuito del Jarama para ponernos a los mandos de dos modelos de la marca alemana de los cuatro aros. La jornada prometía interesante, y vaya si lo fue. Nunca había dado tantas vueltas al circuito madrileño de forma tan seguida y lo peor de todo es que me quedé con ganas de más. Otra vez será.

A las 9:30 de la mañana puntuales, procedieron a explicarnos lo que íbamos a hacer, no sin antes hacer un recordatorio de en qué grupo/nivel estaba el curso que haríamos esa mañana. Recordemos que Audi, igual que otras marcas de coches, ofrece varios cursos de conducción a sus clientes para enseñar a llevar, conducir y domesticar sus modelos de calle y estar entrenados para hacer frente a las situaciones límites que nos podamos encontrar en cualquier carretera o autopista. La finalidad del curso es que con la experiencia, el conductor tenga los reflejos suficientes para salvar una situación peligrosa no ya del golpe porque a veces es imposible por muy experimentados que seamos, pero sí convertir una situación de peligro grave en un leve accidente.

Audi Driving Experience en el Jarama

A través de su Escuela de Conducción y Seguridad y con Jordi Gené e Ignacio Pérez (experto en drifting y luego veremos porqué) a la cabeza, podremos disfrutar el potencial de los vehículos de la marca, conocer su comportamiento en un trazado más seguro que una carretera convencional y sobre todo, disfrutar conduciendo a una velocidad elevada pero siempre con control. Podemos encontrar cursos para todos los niveles que se diferencian en tres grupos: Performance Driving Experience que trata los aspectos técnicos y dinámicos de los coches con tres niveles; Winter Driving Experience que consiste en cursos de conducción invernal y conducción off-road con expediciones internacionales.

Dentro del grupo más extenso de Performance Driving Experience existen tres niveles, de acuerdo al tipo de conducción que queramos. Así pues está el nivel básico o Dynamic donde se explican los elementos de seguridad activa, haciendo hincapié en aspectos tecnológicos como la tracción quattro, el Audi Drive Select, el Magnetic Ride, el ABS y el ESP. El curso Progressive es el de segundo nivel y está enfocado a mejorar la técnica de conducción y extraer el máximo partido al potencial de seguridad y deportividad del vehículo. Los aspectos que más se tratan son la deportividad y la seguridad, que al igual que el anterior se realiza con el Audi TT 2.0 TFSI de 200 CV y el A5 3.0 TDI de 240 CV. Este intermedio fue el que realizamos nosotros.

Audi Driving Experience en el Jarama

Y para los que estos cursos se queden pequeños y quieran explotar en adrenalina, se encuentra el superior, el Sportscar R8 que se realiza con el buque insignia deportivo de la marca y que consiste en un curso de pilotaje en circuito a los mandos de un Audi R8 5.2 TFSI.

Y después del briefing tocaba la parte práctica, lo que todos estábamos esperando: rodar sobre el Jarama. Había 4 coches de cada modelo (A5 y TT) encabezados por un TT RS y un RS4 de los monitores. Primero nos enseñaron el Audi Drive Select de los A5 para conocer y establecer, si así lo queríamos, los parámetros una vez dentro de la pista. Una vez dentro íbamos a rodar en tandas de 5 vueltas: cada coche iría detrás del monitor y por radio daría los consejos a su coche inmediatamente detrás. La 5ª vuelta se haría a bajas vueltas y sin frenar para refrigerar los frenos y dejar reposar el turbo.

Audi Driving Experience en el Jarama

Elegimos el Audi TT en primer lugar y lo primero, sentarnos en los coches (piloto y compañero de copiloto), ajustarnos la posición del asiento y volante tal y como nos habían explicado y a correr. El trazado estaba ligeramente modificado. Justo antes de la curva Bugatti había una chicane de conos y poco antes de final de recta, otra más. Esto permitiría mejorar la anticipación a la curva y controlar a algún Fittipaldi.

Cuando me tocó ir detrás del monitor, me sorprendió nada más mirarme desde su coche que se fijara en la posición de mis manos al volante (debía bajarlas unos centímetros). Fue un detalle que me gustó mucho y que demuestra su profesionalidad fijándose en todos los detalles. A medida que íbamos girando, la trazada iba mejorando y después de 40 vueltas, de las que 15 fueron conduciendo, la cosa era ya bastante significativa.

Los TT iban de lujo, se notaba una suspensión dura y que habían sido fabricados para cumplir con la deportividad que se le exige. Tanto la suspensión como los frenos y motor iban acorde con lo que se exigía. La limitación del control de tracción al salir de una curva era bastante notable, sobre todo si la trazada se hacía mal –lo suyo es que los sistemas no salten– y el ESP ya ni hablar, más de uno hubiera dejado el coche aparcado en algún punto del circuito sobre la arena. Los había tanto con cambio automático como manual y en modalidad sport del primero, el cambio era casi al corte de inyección. Muy buena puesta a punto.

Audi Driving Experience en el Jarama

No puedo decir lo mismo de los A5. No es que me defraudaran, porque es un cochazo, pero sí que no les vi muy acordes con la deportividad que se les exigía. Los sistemas de seguridad, de igual manera que en los TT, no había que utilizarlos -aunque siempre terminaba iluminándose algún testigo en el cuadro- pero la suspensión y los frenos no estaban del todo finos. En giros demasiado bruscos, el coche balanceaba como si de una barca pareciera y los frenos al coger mucha temperatura terminaban por no ofrecer su máximo rendimiento. No daba sensación de inseguridad, pero sí que se notaba que los sistemas saltaban más que en los TT, al menos en el caso de pilotos inexpertos como éramos nosotros.

Audi Driving Experience en el Jarama

Y como no podíamos estar eternamente consumiendo neumáticos (ver detalle), gasolina, frenos y dejar sordos a los de la urbanización de al lado del circuito -digo yo que el circuito ya estaba cuando se compraron la casa-, al final nos esperaba una sorpresa. Ignacio Pérez, máximo responsable de la Escuela a bordo de un Audi S4 avant con 333 CV de potencia se encargaría de darnos una vuelta muy especial al más puro estilo drifting.

Entrar de lado en una curva -la que menos a 95 km/h- y ver que el coche termina de dar la curva y vuelve a quedarse recto en la meta es una cualidad de la que muy pocos pueden presumir. Ya corrí a bordo del Porsche GT3 SRS de Miguel Ángel de Castro, alguna vuelta con un BMW M3, pero esta sensación de entrar de lado en la curva nunca la había experimentado. ¡Es acojonante!

En el video se puede ver la primera vuelta que dimos en toda la mañana. Se puede escuchar como el monitor va enseñando lo que nos encontraremos a lo largo del circuito y las instrucciones que nos irá dando y cómo lo hará. No es gran cosa, y os aseguro que tenía más mucho mejores, pero cuanta más velocidad, más inestabilidad de la cámara y menos se aprecia. ¡Disfrutadlo!

Página oficial | Audi Driving Experience
Fotos | Audi y Javi Vicente

un comentario

  1. Jorge Rubio dice:

    Vamos, vamos, vamos, que pasada y que disfrute tiene que ser… yo de mayor también quiero una prueba de estas…
    Un abrazo

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