Citroën C4 Cactus 1.6 HDi 92 CV ETG6, prueba y opinión

Diego G. Moreira     18 junio 2015     8 min.
Citroën C4 Cactus 1.6 HDi 92 CV ETG6, prueba y opinión

Prueba del Citroën C4 Cactus, el compacto francés lo hemos puesto a prueba con el motor diesel 1.6 HDi de 92 CV y caja de cambios ETG6. Te contamos todo sobre el motor, consumo, comportamiento, diseño exterior, interior y equipamiento del C4 Cactus, así como sus precios.

Motor y prestaciones

La unidad que pudimos probar escondía bajo el capó el conocido propulsor 1.6 HDi que ofrece 92 CV en su variante actual, eso sí, asociado sí o sí a la caja de cambios automática ETG de seis relaciones. El otro propulsor diesel con caja manual también es un 1.6 HDi pero desarrolla 100 CV (en su última actualización).

¿Son suficientes 92 CV? Rotundamente sí. Las prestaciones del Citroën C4 Cactus con este propulsor son más que dignas para mover sobradamente al compacto francés. En parte porque el propulsor ofrece unas prestaciones suficientes (230 Nm desde 1750 r.p.m.) y además tampoco es un coche pesado (1145 kg).

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En carretera y ciudad no vamos a echar en falta más potencia, ahora bien, si nos metemos en autovía con dos o más personas abordo, entonces es cuando notamos que son 92 CV, aunque su respuesta sea correcta. Como siempre, la caja de cambios automática (aunque realmente es un embrague automático) no es todo lo confortable que nos gustaría y más aún comparándola con una CVT, pero es barata y su funcionamiento es correcto sin más.

Desde las levas podemos cambiar entre las diferentes marchas (6 velocidades) y los botones del cambio van situados en un lugar muy visible, en la consola central. Cuando nos ponemos a hacer una conducción dinámica es cuando más se nota la falta de confort de la caja, mientras que en conducción tranquila es cómoda, sobretodo en ciudad.

Comportamiento

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Nos ha sorprendido muy gratamente la puesta a punto de la suspensión del Cactus, puesto que es más firme que otros modelos de la marca. Es también un coche ágil, más aún con este propulsor turbodiesel, e incluso en carretera es estable.

En ciudad, la caja automática hace que sea un coche cómodo, así como su ligera altura con respecto a otros compactos aporta mayor visibilidad, y no es un coche muy grande, por lo tanto aparcar no es un problema.

En carretera el C4 Cactus es ágil, fácil de conducir y estable, incluso llega a ser algo divertido. Mientras que en autovía es estable y cómodo, pero falla en la insonorización (un punto mejorable).

Consumo del Citroën C4 Cactus

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Sin duda el apartado de consumos es donde más destaca este francés con personalidad propia, puesto que en carretera se conforma con sólo 4,5 litros a los 100 km en nuestro recorrido habitual de pruebas. En autovía no se queda corto y en nuestro viaje habitual entre Madrid > Vigo > Madrid el consumo medio fue de 4,9 litros a los 100 km.

En ciudad sube algo más el consumo, además también penaliza la caja de cambios automática, pero se mantiene en los 6,5 litros a los 100 km.


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