El nuevo CEO de Honda prefiere coches que cautiven a los súper ventas

Guillermo Arnal     6 julio 2015     4 min.
El nuevo CEO de Honda prefiere coches que cautiven a los súper ventas

La política del sucesor de Takanobu Ito se fundamentará en la apuesta por vehículos más apasionantes e innovadores y una reestructuración del modelo productivo. Se incrementará la actividad de las factorías extranjeras, se negociarán nuevas alianzas con otras marcas y el I+D cobrará más importancia.

El nuevo presidente y director ejecutivo de Honda, Takahiro Hachigo, aspira a distanciarse de su antecesor, Takanobu Ito, priorizando modelos que apasionen e innoven a objetivos de ventas demasiado ambiciosos -Ito quería llegar a los seis millones en 2017-. El antiguo responsable de I+D en China de la marca ha explicado hoy su política corporativa en su primera comparecencia ante los medios desde que se anunció su nombramiento en febrero.

«Quiero crear una nueva Honda«, ha aseverado esta mañana Hachigo en la sede de Tokio. El plan lo vertebrarán dos pilares clave, uno relativo a las características de los vehículos y otro a la organización productiva a escala global. La reestructuración empresarial perseguirá optimizar el uso de los recursos de Honda, ralentizar las pérdidas y las caídas de ventas y restablecer la reputación del fabricante, muy castigada por el tsunami de 2011, las sucesivas llamadas a revisión, las fluctuaciones del yen, etc.

Honda-S660-25

Hachigo quiere lanzar más coches desenfadados e innovadores como el S660, siempre con unos estándares de calidad mucho más estrictos.Curtido en centros de I+D de tres continentes, Hachigo basará el primer pilar en reforzar la labor de este departamento, una meta que ya marcó Ito en 2014. La concepción de los automóviles tomará más tiempo, conllevará inspecciones de calidad adicionales para evitar que se repitan escándalos como el de Takata -Honda ha sido la única que ha registrado siniestros mortales- y empleará una mayor cantidad de tecnologías inéditas en la empresa y en la industria automovilística.

Hachigo quiere, asimismo, diseñar coches menos anodinos y mejor ajustados a las tendencias de mercado. La filosofía la encarnan ya ejemplos como el descapotable S660, por ahora exclusivo de Japón pero más tarde disponible en más regiones como S1000. Algo similar sucederá con el Civic, cuya siguiente generación estrenará plataforma y un propulsor de menor cilindrada sobrealimentado por turbocompresor.

HUM - 2012 Civic Production

Para aliviar la presión a las factorías japonesas, Honda recurrirá en mayor medida a las extranjeras, que evitarán al mismo tiempo la infrautilización de su capacidad productiva.La compensación de los gastos asociados a esta nueva estrategia de I+D se atribuirá a la redefinición del patrón productivo. La cúpula de Honda considera que se ha presionado demasiado a las instalaciones niponas y aprovechará aquellas situadas fuera de Japón para equilibrar la balanza y, paralelamente, impedir que estas adolezcan de actividad muy inferior a la que deberían tener.

Estas medidas también empezaron a ponerse en marcha meses atrás con decisiones como trasladar la fabricación del CR-V a Canadá, convertir la factoría británica de Swindon en plataforma de exportación del próximo Civic a todo el mundo o la inauguración este mes de su primer centro de ensamblaje en África, una fábrica en Nigeria de donde saldrá un millar de Honda Accord cada año.

El dirigente de Honda ha indicado en su discurso de esta mañana que aumentará las sinergias entre las seis regiones donde la empresa está presente y que permanecerá abierta a nuevas alianzas y nuevos acuerdos estratégicos -en inglés, joint-ventures– con sus rivales buscando compartir gastos de I+D.

Diferentes métodos con los que corregir la cuenta de resultados: los beneficios de explotación cayeron un 19 % este último año fiscal con respecto al previo. Uno de los motivos es el dinero destinado por Honda a las campañas de reparación de los airbags de Takata, proveedor con el que corta la relación y al que no ofrecerá ayuda financiera.

takata-logo

Hachigo, ingeniero de 56 años, trabaja para Honda desde 1982. Comenzó como diseñador de chasis, participó en la gestación de la segunda generación del Odyssey y en la apertura de la primera factoría en Canadá donde se montó el monovolumen, se encargó de revivir las instalaciones de Suzuka tras el terremoto de 2011, fue vicepresidente de la división europea en 2012 y de 2013 a 2015 se encargó del I+D en China.

Fuente | Honda y Reuters

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