El motor Skyactive-X de gasolina que funciona como un diésel, la nueva propuesta de Mazda

Victor Alós Yus    @sepelaci    10 agosto 2017     2 min.
El motor Skyactive-X de gasolina que funciona como un diésel, la nueva propuesta de Mazda

Con el anuncio de este motor de gasolina que funciona como un motor diésel, Mazda da un paso adelanten en la movilidad sostenible y reduzca las emisiones

Mazda acaba de revolucionar el mundo de la automoción con el anuncio del desarrollo del motor Skyactive-X, un motor de gasolina que puede llegar a funcionar como un motor diésel. Es decir, en lugar de funcionar creando la combustión de la gasolina con una chispa, como hacen los motores de gasolina tradicionales, utiliza la presión para conseguir el mismo resultado. Este sistema ayudará a ofrecer una mayor eficiencia en la transmisión de la energía, evitando las pérdidas que son normales en los motores de gasolina.

La combustión más suave del combustible permite un mejor aprovechamiento de este y en consecuencia, ofrece una mejora del rendimiento del motor que se puede cifrar entre un 20 un 30% respecto a los actuales motores de gasolina que utiliza hasta el momento la marca japonesa. Si se compara con los motores que utilizaba Mazda en el año 2008, esta diferencia se sitúa entre el 35 y el 45%. Esta tecnología recibe el nombre de Spark Controlled Compression Ignition y, al parecer, estará lista para su uso industrial a partir del año 2019.

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El motor Skyactive-X equipará esta tecnología y representará toda una revolución en el mundo de la automoción. Podemos pensar que este tipo de motores prescindirá de las bujías, pero nada más lejos de la realidad. También utilizarán la chispa generada por las bujías, pero solo para asegurar que la combustión del combustible se realiza bien. En teoría, y según han explicado desde Mazda, solo funcionarán si la combustión por presión no se realiza de manera correcta. También utilizará este sistema en momentos en los que se necesita que el motor funcione como un motor de gasolina tradicional.

La intención de Mazda es mejorar la eficiencia de sus motores para conseguir reducir las emisiones contaminantes de sus vehículos al 50% respecto al año 2010 en 2030 y de un 90% en el año 2050. Para conseguir esto, no solo utilizarán este tipo de motores, que conseguirán la eficiencia del diésel con las emisiones de uno motor de gasolina. Prevén que en la próxima década tendrán modelos híbridos y eléctricos que ayudarán a hacer posible esos objetivos, que se han convertido en el objetivo principal de la compañía.

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