Opel Astra 2.0 CDTi 160 CV Sport, prueba (Parte I)

Diego G. Moreira     31 agosto 2010     5 min.
Opel Astra 2.0 CDTi 160 CV Sport, prueba (Parte I)

Seguimos con los compactos en Highmotor, si el Alfa Romeo Giulietta era uno de esos que no podíamos pasar por alto, el que os traigo en esta ocasión es otra de las novedades importantes este año en el apartado de compactos. Porque el nuevo Opel Astra ha significado un cambio importante respecto a la anterior […]

Seguimos con los compactos en Highmotor, si el Alfa Romeo Giulietta era uno de esos que no podíamos pasar por alto, el que os traigo en esta ocasión es otra de las novedades importantes este año en el apartado de compactos. Porque el nuevo Opel Astra ha significado un cambio importante respecto a la anterior generación y llega como una opción interesante dentro del segmento.

Nuestro Astra equipaba el motor 2.0 CDTi de 160 CV, todo un conocido para nosotros (puesto que lo hemos probado en el Insignia y en su versión EcoFLEX). Sin duda el motor más racional para el Opel Astra es el 1.7 CDTi de 125 CV, pero para aquellos que buscan algo más de potencia y una buena respuesta el motor de 160 CV es una opción muy válida.

El Astra nos ha gustado especialmente por el diseño, y una percepción de calidad muy alta, además nuestra unidad era la equipada con el acabado Sport (con algunos extras) y nos pareció un mini Insignia en cuanto a acabados y calidad interior. También en el apartado dinámico nos agradó la agilidad de este compacto, por lo que vayamos paso a paso como de costumbre en nuestras pruebas y empecemos por su motor diesel de 160 CV.

Motor y prestaciones

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Empezamos por el motor de nuestro Astra, el 2.0 CDTi de 160 CV un motor que también equipa el Insignia, o que equipará el nuevo Saab 9-5. Se trata de un motor turbodiesel típico con poca respuesta a bajo régimen, puesto que el motor responderá con contundencia por encima de 1.800 r.p.m. hasta pasadas las 3.500 r.p.m., pero a bajas vueltas nos veremos obligados a jugar con el cambio manual de seis velocidades.

Eso sí, cuando nos movemos sobre las 2.000 r.p.m. tendremos una respuesta contundente del motor y se nota su potencia. Como comentaba anteriormente a este motor va unida una caja de cambios manual de seis velocidades con unos desarrollos bastante largos.

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Parece que es algo común a este motor y caja de cambios, pero esos desarrollos nos obligan a usar la sexta sólo por encima de 110 km/h, porque como vayamos a 100-110 km/h en sexta el coche no tiene una respuesta tan eficaz como en quinta. Este detalle ya nos pasó en el Opel Insignia que habíamos probado anteriormente, parece que están diseñados para las carreteras alemanas.

En definitiva este motor diesel de 160 CV tiene una respuesta contundente que hace del Astra un vehículo ágil y potente, eso sí, para aquellos que busquen algo más de economía con el motor 1.7 CDTi de 125 CV es más que suficiente para mover al Astra.

Comportamiento

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Lo primero que me gustó del Opel Astra es la sensación de confort interior, apenas percibimos ruidos del exterior y el confort de marcha es muy bueno, a la altura de una berlina. Pero entrando en el apartado de comportamiento, tenemos un vehículo muy aplomado y con un comportamiento muy ágil, no llega el nivel de agilidad del Alfa Romeo Giulietta que recientemente hemos podido probar, pero si supera con creces a muchos vehículos típicos de este segmento.

Nuestra unidad equipaba el sistema FlexRide, que modifica la respuesta del acelerador, suspensiones y dirección. En modo Tour se viaja muy cómodamente con unas suspensiones orientadas al confort y una dirección más bien blanda, mientras que en modo Sport tenemos un vehículo con un comportamiento muy ágil y una buena respuesta tanto de su motor como del sistema de suspensiones, es precisamente en este modo donde notamos con mayor incidencia la agilidad del Astra.

Pero no puedo dejar el apartado de suspensiones sin hablar de la peculiar suspensión trasera del Astra, en muchos compactos se recurre a una suspensión multibrazo (como el Ford Focus) pero en Opel y por cuestiones de ligereza, espacio y comportamiento han optado por un eje de torsión combinado con un paralelogramo de Watts, que refuerza la sujeción lateral y evita que las ruedas traseras pierdan su rumbo ante esfuerzos laterales.

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En cuanto a la dirección, excepto en el modo Sport, me ha parecido bastante blanda, algo que está muy bien para entornos urbanos y para movernos en el día a día de una gran ciudad, así como para aparcar, pero que en carretera se agradece algo más de dureza que sólo nos la aportaba el modo Sport.

Por último para parar a este compacto contaba con un sistema de cuatro frenos de disco, que varian en tamaño según la versión y el motor. En nuestro caso los delanteros eran ventilados y los traseros macizos, unos frenos que respondían de forma correcta. Lo más destacable por tanto de su comportamiento es la mezcla de confort de marcha y de un comportamiento ágil ayudado por ese potente motor de 160 CV.

Consumo

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El consumo que hemos obtenido en autopista a velocidad legal ha sido de 5,8 l/100 km, una cifra mejorable pero dentro de lo normal e inferior al Alfa Romeo Giulietta con el motor diesel de 170 CV. Circulando por ciudad y carretera tuvimos una media de consumo de 7,5 l/100 km, y circulando sólo por carretera es muy fácil rondar los 6,5 litros.

Ahora que ya sabemos como se comporta el Opel Astra equipado con el motor diesel 2.0 CDTi de 160 CV, en la segunda parte de la prueba nos meteremos con el diseño tanto interior como exterior del Astra, sin duda un apartado donde ha cambiado radicalmente y como comentaba anteriormente guarda mucha relación con el Insignia, con lo que en calidad eso significa.

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Fotos | David Taboada

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