Tres coches con motores que nada tienen que ver con ellos

Fernando Alvarez     7 julio 2012     2 min.
Tres coches con motores que nada tienen que ver con ellos

Motores insólitos y distintos en coches que no nacieron para llevarlos.

Los trasplantes de corazón en la mayoría de los coches medianos o pequeños son hacia un motor más grande y más potente. Sin embargo, no son muchos los casos de motores V8 reemplazados por motores de seis cilindros o motores rotativos, ni tampoco es común que un glorioso seis cilindros de Porsche sea reemplazado por un brutal V8.

El primer ejemplo que quiero mostrarles es el de un Mustang con un motor de Toyota Supra. En donde antes estaba el motor de 5 litros, ahora se erige el seis cilindros japonés con una preparación que lo hace llegar a 900 caballos. Evidentemente, el resultado es mucho mejor que si este Mustang todavía tuviera su antiguo motor. Una devolución de gentilezas por cada coche japonés al que le fue colocado un motor V8 americano.

Un motor rotativo Wankel no sería la primera elección de alguien que esté en vías de preparar una máquina para carreras de aceleración. Sin embargo, el propietario de este Chevy Nova ha decidido que la mejor elección no era un V8, sino un motor Mazda 13B, usado extensivamente en el Mazda RX-7.

Terminamos este variopinto muestrario con un Porsche 911. En este caso, no encontrarás un Porsche de preparador, sino un Porsche convertido a motor V8, un LS7 de GM para ser exactos. Ya han existido proyectos de preparador con motores V8 para los Porsche, digamos que este no se sale demasiado de la norma. Como curiosidad este V8 entrega 550 caballos y pesa menos que el «6» original de Porsche.

Deja un comentario