Rolls Royce en el Salón de Ginebra 2013

Chema     5 marzo 2013     2 min.
Rolls Royce en el Salón de Ginebra 2013

Rolls Royce ha llevado al Salón del Automóvil de Ginebra 2013 la versión Coupé del Ghost, el Wraith 2014. Este modelo destaca por el lujo y una carrocería con líneas deportivas. Su motor de 631CV de potencia permite acelerar de 0 a 100km/h en 4,6 segundos.

Una de las primeras marcas en presentar sus novedades en el Salón del Automóvil de Ginebra 2013 ha sido la legendaria Rolls Royce. En el Stand, bajo una lona, se encontraba posiblemente una de las joyas más valoradas de dicho evento, el Wraith 2014, el coupé de lujo definitivo.

El Rolls Royce Wraith ha sido mostrado al público en solitario con una combinación en la carrocería de dos colores a juego con su interior. Un vehículo realmente bonito, donde la elegancia, el lujo y la deportividad cobran vida en un solo objeto. La espectación ha sido tal que los chinos no se separaban de él. Estamos seguros que más de uno ya ha realizado su pedido.

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El Wraith toma la base del Ghost, aunque ha diferencia suya, el coupé es 130 mm más corto, 40 mm más ancho y 43 mm más bajo. La distancia entre ejes también se habría visto reducida en 183 mm. En total, mide 5,20 metros de largo. Con esta reducción en el tamaño del vehículo, Rolls Royce espera haber creado un vehículo más ágil en las curvas siendo capaz de hacer frente a coches menos pesados. Por ello, también ha sido desarrollado en el circuito de Nürburgring.

Bajo el enorme capó, una zona del vehículo que en directo parece aún mayor, se encuentra un motor V12 de 6,6 litros de cilindrada que desarrolla 632 CV y 799 Nm de de par máximo. Gracias a su potente latido, el Rolls Royce Wraith alcanza los 100km/h desde parado en 4,6 segundos y una velocidad máxima auto-limitada a 250km/h.

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El interior es sencillamente un Rolls Royce. El lujo, conseguido gracias al cuero y la madera, inunda un habitáculo idéntico al Ghost. Las puertas se abren en sentido contrario a lo habitual permitiendo una entrada más sencilla hacia las cuatro plazas del interior. En el techo, a través de miles de puntitos LEDs, se ha simulado un cielo estrallado.

Imágenes | Highmotor


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