BYD se pone como objetivo incrementar el peso de sus ventas fuera de China hasta el 50 por ciento del total para 2030

El fabricante chino BYD se ha convertido en uno de los actores principales en el sector de la movilidad eléctrica. Un logro que no ha frenado en absoluto las ambiciones de la compañía de cara al futuro, sino todo lo contrario. Con la vista ya puesta en el año 2030, BYD confía en seguir ganando mercado fuera de su propio país, hasta lograr que sus ventas internaciones y locales se igualen.

En 2024, tan solo un 10 por ciento de los 4.27 millones de vehículos eléctricos e híbridos enchufables vendidos por BYD se exportaron, lo que nos da una buena idea de la ambiciosa estrategia de expansión internacional de la marca. Si logra este objetivo, BYD pasaría a competir directamente con gigantes como Volkswagen, Toyota, Stellantis o General Motors en el mercado global.

En China, BYD es ya líder indiscutible, comercializando exclusivamente vehículos eléctricos e híbridos enchufables, ya que la compañía dejó de producir modelos de combustión pura en 2022. Este mismo año BYD aspira a vender 5.5 millones de vehículos, lo que supondría un aumento del 29 por ciento respecto al pasado año, cuando sus ventas también crecieron un impresionante 90 por ciento. BYD confía además en que las exportaciones de sus vehículos este año alcanzarán las 800 mil unidades, prácticamente duplicando las del año anterior (417.204).

Europa jugará un papel clave en las ambiciones internacionales del fabricante chino

La expansión internacional de BYD se centrará en Europa y América Latina, descartando el mercado estadounidense debido a las restricciones comerciales. Estados Unidos impuso aranceles del cien por cien a los vehículos eléctricos chinos hace ya algunos meses, y con el nuevo gobierno federal se han incrementando todavía más, aunque la tasa definitiva parece que podría variar en función de cómo evolucionen las negociaciones entre ambos países.

Para sortear barreras comerciales y acelerar su crecimiento en Europa, BYD está apostando por la producción local. En 2023, anunció la construcción de su primera planta de producción europea en Hungría, que comenzará a operar a finales de 2025. Una segunda planta en Turquía está programada para finales de 2026, y se rumorea que la compañía evalúa abrir una tercera fábrica en el continente, además de producir baterías localmente. Fuera de Europa, BYD planea contar también con nuevas plantas de producción en Tailandia, Uzbekistán y Brasil.

Según algunos reportes recientes, directivos de BYD compartieron a finales del pasado año con los principales inversores de la compañía el objetivo de incrementar las ventas en mercados internacionales hasta igualar las locales para el año 2030, destacando la importancia del mercado europeo para alcanzar esta meta.