Ssangyong Rexton W 4×4, prueba (Motor, prestaciones, comportamiento y consumo)

Las pruebas continúan en Highmotor y seguimos con un 4×4 puro, a la vieja usanza, con reductora y vocación a salir del asfalto. Con la nueva generación del Rexton está disponible la variante 4×2, pero creemos que la mayor virtud del Rexton W es ser todo un superviviente como uno de los pocos 4×4 puros que quedan en el mercado, precisamente por peso hemos probado la versión con reductora.

El Ssangyong Rexton W 4×4 equipa un motor de dos litros con 155 CV, potencia más que suficiente para mover a este gran todoterreno que alcanza las dos toneladas de peso. Precisamenete en esta primera parte de la prueba analizaremos todo lo relativo al motor, prestaciones, comportamiento y también prestaciones off-road, así como consumos.

Motor y prestaciones

El propulsor elegido para mover al Rexton W ya no es de origen Mercedes como los anteriores, es un motor de origen australiano firmado por AVL. Es un 2.0 diesel con turbo y 155 CV, puede parecer algo corto de potencia pero en la práctica mueve al Rexton W con facilidad y además es un propulsor elástico con buena respuesta.

Responde desde bajas vueltas, a 1.500 r.p.m. ya empieza a empujar, es bastante progresivo aunque no destaca precisamente por la suavidad. Eso sí, sobre las 3.500 el motor ya empieza a desfallecer. Lo mejor es que el par motor de 360 Nm lo ofrece desde bajas vueltas, entonces es ideal para conducción off-road y el motor mueve con fuerza y soltura las dos toneladas de peso.

Junto con el motor va una caja de cambios de seis relaciones, con un tacto mejorable y una primera corta ideal para el uso 4×4. Al igual que la sexta que sólo la vamos a usar en autovía pero que consigue reducir los consumos, llendo a 120 km/h va 2200 vueltas.

Comportamiento

Lo de ser un 4×4 puro se nota en el comportamiento, porque las suspensiones están orientadas a un uso off-road. Son bastante blandas y se notan algunas inercias típicas de un todoterreno al circular, aunque eso sí, para carretera o autovía es un coche agradable e incluso ágil.

Lo malo es que la suspensión trasera (eje rígido) además de ser blanda es seca, por lo tanto no filtra como debería las irregularidades del asfalto.

Si nos ponemos dinámicos con el Rexton W hay que tener en cuenta que no es un coche diseñado para ese cometido, pero insisto que en carretera y autovía es relativamente confortable (a excepción de las zonas con mal asfalto) y relativamente ágil para el esquema de suspensiones que lleva, pesos y medidas. Y la suspensión va muy bien fuera del asfalto, un hábitat donde el Rexton W se desenvuelve con mucha soltura.

La dirección es poco precisa, mientras que los frenos detienen con efectividad las dos toneladas de peso del Rexton W.

Comportamiento off-road

Como buen todoterreno el Ssangyong Rexton W dispone de reductora, ya no es la típica palanca que se sitúa al lado del cambio, ahora es un mando giratorio, pero sigue siendo una reductora con sus diferentes modos (4×2, 4×4 High y 4×4 Low).

Para conectar la tracción es necesario parar el coche y girar el mando, una vez girado una luz en la instrumentación nos indicará cuando se conecta la tracción. Junto con la reductora, la generosa altura libre del suelo o los neumáticos con bastante perfil y de tipo mixto son algunas de las características que hacen del Rexton W un buen 4×4.

Para probarlo lo hemos metido en la nieve, tal y como se ven en las fotos, y no hemos tenido ningún problema en cuanto a tracción (la reductora es una gran ventaja), además de probarlo por el monte gallego (cortafuegos, zona de piedras…) y la respuesta ha sido buena. Lástima que las estriberas laterales pueden ser un impedimento a la hora de salir al monte, aunque necesarias para subirse al coche sin tener que dar un salto.

En fin, es uno de esos 4×4 de verdad que hoy en día casi no quedan.

Consumo

El consumo en el Ssangyong Rexton W es un dato que tenemos que hayar a la vieja usanza, es decir, haciendo cálculos porque no dispone de ordenador de abordo (un fallo importante) y entonces las cifras las hemos calculado.

Pero además el consumo de nuestra unidad ha sido especialmente alto porque aún estaba sin rodar, sólo tenía 1500 km cuando lo probamos, es decir, toda la prueba fue en el periodo de rodaje del coche. Aún así en autovía gastó 8 litros a los 100 km.

En carretera lo normal es que ronde los 9-10 litros a los 100 km, estas cifras barajan algo más una vez que pase el rodaje del coche. Mientras que en ciudad el consumo si que es elevado y dudamos que baje mucho por su peso y medidas, en concreto en nuestra prueba rondó los 13 litros a los 100 km.

Fotos | R. Rodriguez (Equipo de pruebas)