El importador de Brilliance en Alemania se declara en bancarrota

Al boom que siguió a las presentaciones, estimaciones y planes de ventas a través de toda Europa de coches chinos, ahora le sigue una caída en picado aún peor que sus contrapartes europeas. Y uno de los signos de los malos tiempos para las automovilísticas chinas es la bancarrota declarada de HSO Motors, el importador de Brilliance para Alemania.

El punto crítico de los males de Brilliance fue que la marca no pudo recobrarse después de aquella desgraciada prueba de choque de ADAC, en donde el Brilliance BS4 sacó cero estrellas. De nada valió que los chinos rediseñaran el coche entero para una posterior prueba en donde sacaron tres estrellas. El mal ya estaba hecho.

Se habla también de una calidad menos que regular para los coches Brilliance que tendrían que haber «invadido» Europa. Lo cierto es que las marcas occidentales han aumentado la oferta de coches más accesibles, con precios más al alcance del bolsillo medio. Y Brilliance tampoco pudo competir con el precio de sus modelos.

Otro motivo parece que ha sido la falta de motores diésel de la marca, una opción que se ofrecería hasta dentro de casi dos años. En un continente casi dominado por los diésel, al día de hoy es casi inadmisible que un coche no tenga su correspondiente «hermano» diésel.

Parece que a partir de ahora, los chinos de Brilliance manejarán ellos mismos las operaciones de exportación a Europa. Les deseamos toda la suerte del mundo.

Vía | Eurocarblog