Marchionne confirma que Chrysler y Lancia se unirán del todo para finales de este año

Guillermo Arnal     20 enero 2010     2 min.
Marchionne confirma que Chrysler y Lancia se unirán del todo para finales de este año

Aunque a muchos les pese, el «Chrysler Delta» presentado en el pasado Salón del Automóvil de Detroit, en el que los grupos estadounidense e italiano volverion a compartir espacio, es solo el principio de la reforma total que sufrirán Chrysler y Lancia durante el 2010. El consejero delegado de ambos grupos, Sergio Marchionne, declaró en […]

Aunque a muchos les pese, el «Chrysler Delta» presentado en el pasado Salón del Automóvil de Detroit, en el que los grupos estadounidense e italiano volverion a compartir espacio, es solo el principio de la reforma total que sufrirán Chrysler y Lancia durante el 2010. El consejero delegado de ambos grupos, Sergio Marchionne, declaró en una entrevista a la revista británica Autocar que esos dos fabricantes terminarán de fusionarse del todo a finales de este mismo año.

Se trata de una idea que lleva en el aire incluso antes de que la compra del grupo estadounidense por parte de Fiat se hiciera efectiva, y que ha estado creando mucha polémica desde entonces. Chrysler y Lancia tienen tradiciones y formas de construir vehículos muy distintas, pero, según Marchionne, la fusión tiene sentido porque las gamas de ambas marcas tienen huecos que podrán cubrirse la una a la otra.

Para concretar más esta afirmación, Marchionne dijo: «En Europa, Lancia es una marca pequeña y sin desarrollar que no tiene nada mayor que el Delta. Chrysler, la cual tiene un verdadero alcance global, no posee nada menor. Ponlas juntas y tienes una gama completa.» Lo que no concretó es la forma con la que ambas marcas acabarán por complementarse: si con modelos nuevos pero basados en los que tiene la marca opuesta, o sencillamente con productos del tipo del «Chrysler Delta» que consisten únicamente en cambiar los logotipos.

Y hablando del Chrysler Delta, Marchionne confirmó que probablemente acabe por comercializarse y pasar a formar parte de la familia de Chrysler en Norteamérica, alegando que «no habría ningún conflicto con Lancia». Por último, subrayó: «no voy a vender Lancias en los Estados Unidos«. Todo un gran cambio para Chrysler, que finalmente recibirá la por algunos temida transfusión de «sangre italiana» a sus venas.

Vía | Autocar

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