Mercedes-Benz adelanta algunas de las mejoras que incorporará la nueva Sprinter

La división de vehículos comerciales de Mercedes-Benz se prepara para una revolución en su gama de furgonetas eléctricas a partir de 2026. El próximo año arrancará con el lanzamiento de la sucesora de la actual EQV, un modelo eléctrico que dará paso a una familia completamente renovada. Poco después llegará la VLS, una limusina de lujo con hasta ocho plazas pensada para el transporte de pasajeros VIP y su empleo como oficina móvil, orientada fundamentalmente al mercado chino, donde se espera que la demanda de este modelo sea muy alta. Seguidamente, se incorporarán a la gama las variantes comerciales de la nueva Sprinter, que mantendrán su versatilidad con carrocerías cerradas y plataformas en distintos tamaños.

La firma de Stuttgart revolucionó el segmento de los vehículos comerciales hace tres décadas con la primera Sprinter, y desde entonces este modelo se ha mantenido como referencia frente a la competencia. La tercera generación, lanzada en 2018 y electrificada al año siguiente, recibió en 2024 una profunda actualización con una mejora sustancial de su eficiencia y, este próximo año, la cuarta generación dará un salto tecnológico gracias a la arquitectura de 800 voltios, que permitirá recargas ultrarrápidas.

Aunque inicialmente el fabricante alemán anunció que su nueva gama de vehículos comerciales sería ya cien por cien eléctrica, el crecimiento más lento de lo esperado en el mercado de vehículos eléctricos ha llevado a la compañía a mantener versiones con motor de combustión, incluyendo híbridos. Mercedes-Benz empleará dos plataformas, VAN.EA para los modelos eléctricos y VAN.CA para los térmicos, compartiendo ambas el 70 por ciento de los componentes para reducir así costes de producción.

Lo que está por venir

Aunque todavía tendremos que esperar a la presentación oficial para conocer todos los detalles, Mercedes-Benz insinuó el diseño exterior de su nueva gama de furgonetas eléctricas durante la celebración del aniversario de la marca, en una escultura de piedra de 6.5 metros denominada «The Boulder«. Esta escultura dejaba entrever una parrilla bastante prominente y un capó más largo y bajo de lo habitual para tratarse de una furgoneta, que abre la puerta a la posible incorporación de un maletero delantero. Tanto las versiones de pasajeros como las comerciales podrán equipar eje trasero direccional para mejorar así la maniobrabilidad en espacios reducidos, gracias a un menor radio de giro.

En lo que respecta a la conectividad, las nuevas furgonetas de Mercedes-Benz incorporará MB.OS, el sistema operativo ya presente en turismos eléctricos como el CLA y GLC. Soportará actualizaciones remotas OTA e integrará aplicaciones de terceros. Lo que permitirá, por ejemplo, que los gestores de flotas puedan acceder directamente desde la pantalla a herramientas como Van Uptime Monitor, que maximiza la disponibilidad y eficiencia operativa.