Saab compartirá la arquitectura del nuevo 9-3 con otras marcas

Guillermo Arnal     22 noviembre 2010     2 min.
Saab compartirá la arquitectura del nuevo 9-3 con otras marcas

La próxima generación de la berlina media de Saab va a ser un lanzamiento tan importante que cada nueva información que se conoce es razón para leerla con atención. La que dio Autocar hace algo más de un mes se puede completar esta vez con la de otra publicación británica, la revista CAR, que ha […]

La próxima generación de la berlina media de Saab va a ser un lanzamiento tan importante que cada nueva información que se conoce es razón para leerla con atención. La que dio Autocar hace algo más de un mes se puede completar esta vez con la de otra publicación británica, la revista CAR, que ha hablado con los consejeros delegados de Saab y Spyker, Jan Åke Jonsson y Victor Muller, en el Salón de Los Ángeles.

Ya supimos que al nuevo 9-3 lo veremos en el Salón de París en octubre de 2012, pero en esta entrevista se ha afirmado que su fabricación casi ni esperará a que cierre la feria gala. Asimismo, existen varias posibilidades de que al año siguiente haga lo mismo pero en China, facilitando así el camino para alcanzar el objetivo de producción que se ha impuesto Saab (100.000 unidades anuales en total).

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También se pueden confirmar ya nuevas carrocerías, la de tres volúmenes y la familiar, que se añaden a una estilo coupé con portón y al tradicional descapotable, el cual conservará la capota de tela. Las últimas novedades atañen a la plataforma Phoenix sobre la que se montará el siguiente 9-3.

Para compensar sus gastos de desarrollo y sanear algo más las cuentas de la marca sueca, Jonsson y Muller señalaron en la entrevista que la arquitectura se venderá a otras empresas, aunque ese será uno de varios métodos en los que están pensando. Asimismo, la plataforma Phoenix podría ser la base de los próximos 9-4X y 9-5, en caso de que Saab quiera deshacerse definitivamente de la tecnología de General Motors que usan los actuales.

Por último, Muller ha aclarado que, si el crossover no va a tener un motor Diesel, que parecería imprescindible si quiere llegar al asfalto europeo (donde no esperan una cuota mayor del 30 %), es porque, en primer lugar, su función será la de hacer ver a los clientes que Saab tiene más productos nuevos que el 9-5, y en segundo lugar, porque sus mercados principales serán Estados Unidos, China, Rusia, Brasil y Australia.

Vía | CAR Magazine

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