Rolls Royce se lo está pensando: de las baterías a la pila de combustible de hidrógeno

El lanzamiento del Rolls Royce Spectre ha sido todo un éxito. El primer modelo eléctrico de la prestigiosa marca británica ha provocado que muchos de los nuevos compradores de la marca se haya decantado por la movilidad eléctrica, también en este tipo de vehículos, tan exclusivos. Pero este éxito ha provocado un problema a Rolls Royce: demasiados pedidos del coupé eléctrico.

La forma de producir estos coches hace que sea complicado para la marca atender de manera correcta toda la demanda surgida de repente. Así que la respuesta del fabricante no se ha hecho esperar. En una entrevista realizada a Autocar, el CEO de la compañía, Torsten Müller-Ötvös, ha asegurado que ya están pensando en alternativas a las baterías para agilizar la producción de los modelos electrificados.

El futuro, en manos del hidrógeno

Para la marca de coches exclusivos, el futuro puede pasar por cambiar la fuente de alimentación de los motores eléctricos que equipan sus modelos eléctricos. Las baterías podrían dar paso a un sistema de pila de combustible de hidrógeno, más eficientes y que, además, aportan una autonomía más elevada.

El Rolls Royce Spectre ofrece una autonomía de algo más de 500 kilómetros, lo que le permite ser bastante eficiente. Sin embargo, los estándares que buscan los conductores de un coche de estas características hace que sea más práctico el uso del hidrógeno. Pero hay algo que tiene claro el CEO de la compañía: el motor de combustión de hidrógeno queda totalmente descartado. Aunque esto supondría que se podría alargar la vida de sus motores V12, Müller-Ötvös considera que este tipo de motores no es práctico ni la manera más eficiente de utilizar el hidrógeno.

La única alternativa que ve para este elemento es la pila de combustible. Esta se ha convertido en una de las alternativas más eficientes para los coches de batería, ya que las celdas de combustible ofrecen un rendimiento energético similar al de las baterías y resultan más prácticas.

La llegada del hidrógeno a Rolls Royce se vincula al lanzamientod del BMW iX5 Hydrogen, el SUV del grupo que dará la bienvenida a la pila de combustible de hidrógeno a los modelos de producción del mismo. Este modelo se comercializará con pocas unidades, pero permitirá probar el sistema de propulsión basado en la pila de combustible de hidrógeno, así que servirá de banco de pruebas para incluir este en la marca de lujo.

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Pero para dar el paso, antes hay que contar con una buena infraestructura de hidrogeneras. Algo que, si en el caso de las estaciones de carga para coches eléctricos ya se tienen problemas para encontrar uno, se multiplica en el caso de los puntos de carga de hidrógeno. Hasta que no exista una buena infraestructura de estos, no se podrá comenzar a tener en cuenta el uso de esta tecnología.