DeLorean DR-7 el coche volador que Marty McFly habría soñado tener

La duda podría ofender, pero sería interesante saber qué habría preferido que Doc le entregara para sus viajes en el tiempo el Delorean del condensador de fluzo o este imponente DeLorean DR-7 que bien podría llegar al mercado en 2018.

El nombre no es casual. El diseñador del nuevo DR-7 es el sobrino de John DeLorean, el genio que creó el mítico DeLorean DMC-12 que se fabricó entre 1981 y 1982 con puertas de alas de gaviota cautivó y carrocería metálica de acero inoxidable sin pintar, que acabó convertido en objeto de culto después de protagonizar la trilogía de películas de «Regreso al Futuro».

Ahora el apellido DeLorean vuelve a entrar en escena de la mano de Paul, quien trabaja en el diseño de un coche tan fantástico como el de su tío solo que en esta ocasión está pensado para volar un poco más arriba del asfalto, a bastantes metros de altura.

El DR-7, que es como se llama el vehículo en cuestión, es un proyecto de coche volador de 9 metros de largo por 5,6 de ancho. Se trata de un vehículo de despegue y aterrizaje en vertical (VTOL), propulsado por un motor eléctrico gracias al cual podrá recorrer distancias de hasta 193 kilómetros con una misma carga de batería, elevándose mucho más alto que cualquier otro vehículo desarrollado hasta el momento por su competencia. Gracias a esa mayor altura a la que el vehículo puede volar, la distancia que el DR-7 podrá recorrer será siempre superior a la que pueda recorrer cualquiera de los competidores conocidos hasta la fecha, como el Aeromobil, que ya está listo para ser producido.

El DR-7 está destinado a competir con otros proyectos similares existentes en el mercado. Cuenta para impulsarse con dos potentes motores eléctricos acoplados a unas hélices dispuestas en la zona frontal y trasera del vehículo, que se podrán ajustar para efectuar las maniobras de despegue y aterrizaje en vertical. Su cabina cuenta con capacidad para transportar a dos pasajeros a bordo. De momento, no hay desarrollado un prototipo funcional, únicamente dos modelos a escala y un tercero a un tercio del tamaño real sobre el que se están probando los distintos componentes que se incorporarían al futuro desarrollo de un prototipo real y funcional del vehículo, que se espera esté listo para volar a finales de 2018.