Coches sin carnet: qué son, cuánto cuestan y por donde podemos circular

Javier López    @jlopezbryan96    3 mayo 2018     9 min.
Coches sin carnet: qué son, cuánto cuestan y por donde podemos circular

La normativa de los mal llamados coches sin carnet es sencilla, pero conviene repasarla porque hay que superar determinadas pruebas y conocer la edad mínimas

El carnet de conducir puede convertirse en determinadas ocasiones en un problema repetitivo, el cual no siempre es sencillo de resolver. Sin embargo, siempre se nos presentan otras alternativas para poder movernos pese a no tener nuestro permiso como el transporte público en todas sus facetas aunque, en ciertas ocasiones, necesitamos algo más de precisión y disponibilidad en el día a día. La solución a este inconveniente la podemos resolver con los cuadriciclos ligeros, comúnmente conocidos como «coches sin carnet».

En el artículo de hoy haremos un análisis en profundidad sobre este tipo de vehículos, los cuales pueden ser muy útiles en el día a día y nos permitirán prescindir en multitud de ocasiones del carnet de conducir. Sin embargo, debemos atender una serie de características y requisitos que tenemos que cumplir si queremos ponernos al volante de uno de estos pequeños pero útiles coches.

¿Qué es un «coche sin carnet» o cuadriciclo ligero?

Lo primero que debemos tener claro amigo conductor son los elementos que hacen que un automóvil entre dentro de esta categoría. Se considera cuadriciclo ligero a todo aquel vehículo de cuatro ruedas que declare en la báscula un peso en vacío inferior a 350 kilogramos. Al mismo tiempo, también será necesario que su velocidad máxima no sobrepase los 45 Km/h y que su cilindrada sea igual o inferior a 50 cc.

Son un tipo de vehículos que cuentan con una serie especificaciones ejemplares para afrontar el mundo urbano o incluso un entorno más rural, donde los traslados sean de corta distancia y no haya un gran auge de vehículos propiamente dichos. Sin duda alguna, todo aquel que recurra a los cuadriciclos ligeros podrá gozar de un coche excelente para cumplir con su cometido pero, aún así, serán necesarios una serie de documentos para usarlos en su totalidad.

Qué pruebas son necesarias para poder ponernos al volante de un «coche sin carnet»

Es cierto que el nombre coloquial que ha adquirido con el paso del tiempo hace referencia a que no necesitamos un carnet de conducir para poder circular con un cuadriciclo ligero pero, aún así, debemos superar una serie de pruebas y cumplir con ciertos requisitos para poder hacer uso de estos vehículos. A diferencia de un vehículo estándar, no tendremos que superar la mayoría de edad para acceder a ellos, puesto que la edad mínima para conducir un «coche sin carnet» se reduce a 15 años.

La edad mínima para conducir un cuadriciclo ligero es de 15 añosTodo aquel que no conste de un permiso de circulación B -aquel que nos permite conducir un vehículo de mayores prestaciones- y quiera conducir un cuadriciclo ligero, deberá presentarse a un examen psicotécnico, con el objetivo de demostrar que encuentra en plenas facultades de ponerse al volante de un automóvil sean cuales sean sus características técnicas. Una vez superado dicha prueba, será necesario realizar un examen tipo test que constará de 20 preguntas, las cuales serán propuestas por la Jefatura de tráfico.

El examen tipo test constará de 20 preguntas y habrá que superar diferentes pruebas prácticasAl igual que sucede con el permiso B, será necesario realizar una prueba de conducción, la cual se divide en dos tipos en caso de nuestras intenciones una vez obtenido el permiso pertinente: permiso sin restricciones o permiso con restricciones. ¿Qué quiere decir esto? Pues bien, en caso de decantarnos por la primera opción, estaremos autorizados a hacer uso de cualquier ciclomotor de dos, tres o cuatro ruedas y, para ello, tendremos que enfrentarnos a una prueba que consta de dos partes: zigzag entre jalones a velocidad reducida y circular sobre una franja de anchura limitada.

Si nuestro objetivo es tan solo poder circular con cuadriciclos ligeros o triciclos y no con ciclomotores de dos ruedas, tendremos que optar por examinarnos del permiso con restricciones. Esta modalidad consta, al igual que la otra, de dos pruebas, las cuales consistirán en un cambio de sentido de la marcha utilizando las velocidades hacia delante y hacia atrás, en espacio limitado y estacionamiento/salida de un espacio cuya ubicación puede encontrarse en llano, pendiente ascendente o descendiente.

Una vez superada todas y cada una de las pruebas obligatorias, se nos hará entrega de nuestro permiso de circulación, el cual tendrá que acompañarnos en todo momento puesto que este demostrará que somos aptos para poder ponernos al volante de un «coche sin carnet».

El carnet y algo más: permisos necesarios para circular con nuestro cuadriciclo ligero

Al igual que sucede con cualquier tipo vehículo, el carnet de conducir solo nos permitirá ponernos al volante de un cuadriciclo pero, para poder circular con uno propio, necesitamos una serie de documentos que harán legal el transcurso de nuestro «coche sin carnet» por la vía pública. Uno de estos elementos imprescindibles es la matricula que contará con una serie de dígitos para identifica a nuestro cuadriciclo, el cual tendrá que ser matriculado por la Jefatura Provincial de Tráfico de la provincia en la que resida el dueño.

Una vez que el «coche sin carnet» cuente con su correspondiente matrícula, obtendremos nuestro permiso de circulación, donde figurarán todos los datos relacionados con nuestro vehículo al igual que la información sobre el titular del mismo. Al mismo tiempo, la Tarjeta de Inspección Técnica deberá acompañarnos en todo momento cuando circulemos con nuestro cuadriciclo, ya que esta demostrará que nuestro «coche sin carnet» tiene las especificaciones técnicas necesarias para poder circular.

La ITV es otra de las pruebas a las que se verá sometido nuestro nuevo cuadriciclo ligero, ya que tendrá que superarla al igual que cualquier otro vehículo y será necesario que conste de ella para poder hacer uso de este con total legalidad. Durante los primeros cuatro años de vida del coche no será necesario someterlo a ninguna prueba técnica pero, una vez superado dicho periodo, tendremos que hacer la inspección cada dos años.

Ya tenemos todo lo necesario para utilizar nuestro cuadriciclo pero, ¿por dónde se puede circular?

Es cierto que las pruebas a superar y documentos necesarios para poder circular con un «coche sin carnet» son prácticamente iguales a las que requiere un vehículo normal pero, debido a sus especificaciones técnicas, no podremos hacer uso de un cuadriciclo ligero en todo tipo de vías. Su uso más habitual -y lógico- estará achacado al entorno urbano, donde sus pequeñas dimensiones y reducido peso serán dos características idóneas para hacer frente a la ciudad.

Los coches sin carnet no pueden circular por autopistas o autovíasEn caso de que nuestra idea sea plantar cara a las autopistas o autovías este no es nuestro vehículo, ya que los «coches sin carnet» tienen rotundamente prohibido acceder a este tipo vías. Como indica el artículo 36 del Reglamento General de Circulación, los cuadriciclos ligeros deberán circular arcén transitable y suficiente. En caso de que no esté disponible, los «coches sin carnet» ocuparán la parte imprescindible derecha de la calzada.

De esta forma, el uso de nuestro cuadriciclo se verá limitado en determinadas circunstancias y siendo este un medio de transporte idóneo para el mundo urbano, como ya hemos puntualizado, o para un entorno rural donde las distancias sean cortas y haya un alto tránsito de vehículos con unas especificaciones técnicas más prominentes que las de un «coche sin carnet».

Ya sabemos cómo y por dónde podemos circular pero, ¿hay diferencias en el seguro de un cuadriciclo?

Al igual que sucede con el resto de vehículos que circulan por la calzada, será necesario recurrir a un seguro para poder hacer un apropiado del cuadriciclo ligero. Concretamente tendremos que obtener un seguro de responsabilidad civil de suscripción obligatoria, vulgarmente conocido como “seguro obligatorio” (S.O.A). Sin embargo, este tipo de seguro nos cubrirá en determinadas situaciones.

Por una parte, nos servirá de respaldo a la hora de cubrir los daños a las personas y a los bienes de circulación perjudicados en caso de siniestro. Al mismo tiempo, el asegurado se tendrá que hacer cargo de los desperfectos causados excepto en los siguientes casos: conducta o negligencia por parte del perjudicado, fuerza mayor extraña a la conducción -no se considerará fuerza mayor los defectos del vehículo ni rotura o fallo de algunas de sus piezas o mecanismos- y el funcionamiento del vehículo.

¿Qué «coche sin carnet» o cuadriciclo sin motor comprar? ¿Cuánto puede costar un vehículo de estas características?

Como cualquier otro tipo de segmento, las opciones disponibles de cuadriciclos ligeros son numerosas y se nos pueden plantear una serie de dudas a la hora de escoger el candidato idóneo. En territorio español contamos con una serie de marcas que destacan por encima de otras y, al mismo tiempo, ofrecen una serie de características que mejoran la calidad de acabados y de los elementos mecánicos.

Por una parte, nos encontramos con Aixam, una firma de procedencia francesa que lleva cultivando un gran éxito en España desde hace años. El Minauto Access se presenta como la opción más económica dentro de la marca con un precio de partida de 8.990 euros. Este modelo cuenta con un propulsor diesel de 8,15 CV y 21 Nm de par motor pero, en caso de querer un «coche sin carnet» más eficiente siempre podremos recurrir a las opciones eléctricas, como el eCity también de Aixam, el cual cuenta con un precio de 14.790 euros.

Otra de las marcas que debería estar dentro de nuestras opciones es Ligier, la cual también nace en Francia y cuenta con modelos de similares características y calidades. El JS C 50 Club se presenta como la opción más asequible con un precio inicial de 11.690 euros. Al mismo tiempo, el mercado de ocasión también puede brindarnos la oportunidad de adquirir un cuadricicilo por un precio menor y que cumpla exactamente con el mismo cometido.

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