El Volkswagen Polo R Supercar es el compacto de carreras más radical con sus 570 CV

El mundo de los compactos deportivos está en su máximo esplendor, algo debido a las altas potencias que están consiguiendo obtener los fabricantes. Esto mismo se ve reflejado en el mundo de la competición, donde los vehículos de carreras llevan una puesta a punto diez veces más radical que la de su variante de producción, algo que podemos ver en el nuevo Volkswagen Polo R Supercar, la variante más radical del compacto germano para alzarse con la victoria en el campeonato de Rallycross.

Los ingenieros de Volkswagen se han asegurado de conseguir el mayor rendimiento posible para dominar las carreras y han decidido tomar al Polo como base al igual que en otras ocasiones. Sin embargo, la firma germana ha mejorado innumerables aspectos en esta variante de rally, pudiendo introducirse de nuevo en ese remolino de éxito en el que Volkswagen ha estado con antelación.

La mecánica impresiona, pero la estética que ofrece este Polo R con apellido de superdeportivo no desmerece nuestra atención en absoluto. Como indica su propio nombre estamos ante un auténtico Supercar y, aunque sus dimensiones no serían las esperadas en un vehículo de su envergadura en cuanto a prestaciones, se nos ofrece un Polo radical y exaltado en todos los aspectos. La defensa engorda considerablemente gracias a los anchos pasos de ruedas, los cuales contribuyen a las mil maravillas con la aerodinámica del compacto germano.

Al mismo tiempo, dos grandes tomas de aire se forman a ambos lados del splitter delantero, con la intención de refrigerar al Polo R tras una dura jornada rodando a toda velocidad. La zaga sigue la misma filosofía del conjunto y un enorme alerón se extiende desde ella para mantener al Polo de carreras pegado al suelo en todo momento. Sin embargo, para no faltar al respeto a esta extremada y trabajada estética, el equipo de Volkswagen se ha encargado de desarrollar una mecánica que cumpliese con las expectativas.

En el interior de este pequeño pero matón Polo, nos encontramos con un propulsor de cuatro cilindros en línea y 2.0 litros de cilindrada -al igual que en el GTi de calle- capaz de erogar 570 CV de potencia. Para aumentar la eficacia del motor y que sea todo un éxito en la pista, los ingenieros han incluido un sistema de tracción integral 4Motion, una ayuda esencial cuando el vehículo pierda adherencia en plena carrera por el terreno en el que se mueva.

Serán los pilotos Johan Kristoffersson y Petter Solberg los encargados de defender el título junto con este nuevo Polo R Supercar. Tendrán que enfrentarse a 12 pruebas las cuales estarán repartidas entre tres continentes y la temporada arrancará el próximo 14 y 15 de abril en la ciudad de Barcelona, siendo su último tramo en Ciudad del Cabo el 24 y 25 de noviembre.