El Volvo Concept Recharge adelanta cómo será la segunda generación de coches eléctricos de Volvo, diseñados pensando en la propulsión exclusivamente por baterías.
El futuro de Volvo pasará por nuevas baterías, más eficientes y más pequeñas
Victor Alós Yus @sepelaci
1 julio 2021
2 min.
Los planes de Volvo pasan por desarrollar unas baterías para vehículos eléctricos que utilicen celdas de mayor densidad energética y con una carga más rápida.
El futuro de Volvo pasa por la movilidad eléctrica, eso es algo que ya sabíamos desde hacia varios meses. Pero la marca quiere avanzar con fuerza en este sentido y no se limitará a aplicar la tecnología actual a sus futuros modelos eléctricos. La colaboración de Volvo con la empresa de baterías Northvolt permitirá desarrollar nuevas baterías que permitirán aumentar su capacidad y reducir el tiempo de carga y hasta su volumen y peso.
El trabajo de las dos empresas pasa por desarrollar unas baterías con unas celdas que tengan un 50% más de capacidad que las actuales. Esto quiere decir que las baterías pasarán a pesar menos y tendrán más capacidad. Una buena noticia que reducirá el peso total del vehículo pero sin comprometer su autonomía.
La segunda generación de coches eléctricos
La segunda generación de coches eléctricos está siendo diseñada y contará con este tipo de baterías. Permitirán que los coches puedan ser recargados de manera más rápida y contener la misma cantidad de energía en un espacio más reducido. Además, se incorporará al futuro Volvo XC90 la carga bidireccional, que permitirá a este modelo ofrecer energía eléctrica a la vivienda en momentos de uso intensivo de electricidad, ayudando a reducir la factura mensual de electricidad. La carga se puede programar en horarios de tarifa baja y así ahorrar bastante.
La tercera generación de coches eléctricos de Volvo llegará poco después y contará con más novedades. En este caso, se prevé aumentar la autonomía de manera considerable y reducir el tiempo de carga a la mitad, aproximadamente. Esto hará que sea mucho más práctico y eficiente utilizar uno de estos vehículos de tercera generación de Volvo.
La posibilidad de contar con una autonomía de hasta 1.000 kilómetros es algo que será viable con estas nuevas baterías. La estrategia de Volvo también pasa por una política de recuperación y reciclaje de baterías. Los planes de Volvo pasarían por utilizar las baterías que ya no cumplen con las condiciones para alimentar a un coche eléctrico como punto de almacenamiento de energía en los hogares y comercios.
La unión entre Volvo y Nortvolt garantiza que las novedades en este tipo de baterías sean posible y que esto haga avanzar de manera considerable todo lo relacionado con la movilidad eléctrica, que va a acabar por imponerse en las carreteras europeas a partir de 2030.
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