Toyota Alphard, renovación en Japón de un monovolumen muy atractivo

En Europa, el mercado marca que el tipo de vehículo más popular son los SUV. Los monovolúmenes han sido, durante muchos años, muy vendidos en los países europeos, hasta que las compras se han decantado por los SUV. Pero en Asia, este tipo de vehículos familiares siguen teniendo cierto tirón y siendo los elegidos por las familias de Japón, China y otros países. Toyota lo sabe y por eso llega la cuarta generación del Toyota Alphard.

Este monovolumen alcanza ya su cuarta generación y se renueva completamente, con un estilo y una imagen exterior que recuerda al Lexus LM, el monovolumen de la marca premium del grupo. Lo que destaca a primera vista es la gran parrilla delantera, junto con nuevas luces con tecnología LED. Pero esto no todo lo que ofrece de nuevo esta nueva versión del modelo.

Su tamaño, eso sí, se mantiene en las cotas de la generación anterior. Esto quiere decir que presenta una longitud de 5.000 milímetros, una anchura de 1.850 milímetros y una altura de 1.950 milímetros. Todo ello permite una distancia entre ejes de 3.000 milímetros, lo que permite un interior amplio y confortable.

En el interior se puede encontrar una pantalla dedicada a la instrumentación con un tamaño de 12,5 pulgadas. En el centro del salpicadero encontramos una pantalla de 14 pulgadas. En la parte trasera, las salidas de aire y los controles se ubican en el techo, un cambio respecto al modelo anterior. Esta forma parte de un nuevo módulo de la marca, que recibe el nombre de Consola Superior Súper Larga, que también incluye iluminación ambiental LED.

Para acceder con comodidad, se han añadido escalones retráctiles en las puertas laterales correderas, que facilitan el acceso al interior. También se ha preparado una versión para personas con discapacidad, que permiten el acceso más sencillo para estas.

Motorización del nuevo Alphard

Para esta cuarta generación se ha sustituido el motor anterior y se ha añadido un motor atmosférico de 2.5 litros que ofrece una potencia de 182 CV, aunque si se elige la versión Vellfire, de carácter deportivo, esta sube hasta los 279 CV. Esta variante utiliza un motor turbo de 2.4 litros, que ofrece esta potencia superior. Hay una versión con tracción delantera y otra con tracción total, asociadas a un cambio automático de ocho velocidades en el primer caso y un cambio automático de ocho velocidades.

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También se ofrecerá una versión híbrida, que combinará el motor de 2.5 litros con uno o dos motores eléctricos. De esto depende si se trata de tracción delantera o de tracción total. Con estos, se consigue una potencia total de 250 CV. Más adelante, no se descarta la incorporación de una variante híbrida enchufable.

Ese monovolumen de cuarta generación ya se está comercializando en Japón, con un precio que oscila entre los 34.635 y 55.990 euros, al cambio. La versión Vellfire tiene un precio de entre 42.060 y 57.275 euros, según el tipo de tracción. Se van a construir en una proporción de 70% de Toyota Alphard y un 30% de Toyota Vellfire, desde la planta de Inabe. ¿Llegará a Europa? No creemos, ya que los monovolúmenes, como ya he comentado antes, no tienen mucho éxito en nuestro mercado.